La hermana de mi madre montándoselo conmigo
Es mi tía, la hermana de mi madre. Es guapísima, por lo menos para mí, y tiene unas tetas fantásticas. Me miraba con ojos lascivos y sabía que quería algo. Un día que nos quedamos solos en la parcela de mi abuela no se resistió a tirarme los trastos y me la acabe follando, a mi propia tía, increíble. No lo olvidaré jamás, el mejor polvo de mi vida, tremendo.