Dominicana reventada en la playa
Como si fuera un espejismo, este tío se encuentra a esta guarra en medio de la playa, que no tarda en arrodillarse en busca del rabo, lamiéndolo para saborear cada centímetro antes de metérselo en la boca. La guarra acaba clavándose el nardo sentada encima del tío, despatarrándose luego para seguir sintiendo como su coño acaba destrozado con tantas embestidas, pero satisfecha al beber toda la corrida que cae directa a su boca.